domingo, 12 de julio de 2009

La esquina del viento(De Bodeguilla)



De Bodeguilla
¡Chan tatachan! ¡Desde esta esquina! ¡Sin ningún tipo de exclusiva! Y al mismo tiempo que todos los bares de nuestro país, ¡tatachan tatachan! Hoy tenemos el honor de hacer la presentación de la nueva moda, la última novedad en moteros: "Moteros de Bodeguilla", o de cervecería, o de pub de moda. Están causando furor y se reproducen por generación espontánea.
Corre al primer local biker que conozcas y no pierdas la fantástica oportunidad de compartir birra y conversación con una de estas maravillas de la evolución biker. Pero sobre todo, ten mucho cuidado a la hora de distinguirlos, se confunden fácilmente con los moteros de verdad.
El Aspecto: Completamente auténtico. Incluso cuando no llevan moto, utilizan algún pin, pañuelo o marca que los identifique como miembros del colectivo motero.
La Máquina: Impresionante. Dispone de los últimos avances en tecnología punta para conseguir sacarle hasta el último caballo a cada motor (en el caso de ser un pepino) o, si se trata de una custom, tendrá cromado hasta el último tornillo, piezas de prestigiosas marcas y detalles de gran calidad y prestancia.
La Conversación: Interesantísima. Saben de todo y opinan sobre todo.
Y ahora viene el problema, ¿cómo coño distinguirlos del motero de verdad? Pues joder, la solución es sencilla. Por que siempre están allí, en la bodeguilla. Asómate al cuenta kilómetros de su moto y comprobarás que nunca van más allá de la otra bodeguilla que hay dos esquinas más abajo. Prueba a quedar con ellos para ir a cualquier viaje o concentración y verás que nunca les faltan excusas, y todas ellas buenas. Intenta encontrarlos en alguna concentra que este a más de doscientos kilómetros de su ciudad y te darás cuenta que es completamente imposible. Sencillamente, no van nunca a ninguna parte.
Quizás han dedicado tanto tiempo a perfeccionar su máquina que se les ha olvidado que sirve para rodar. La verdad es que no lo sé. Lo que si sé, es que cada día son más.
¿Podría alguien explicarme por qué jodida razón, cada vez que voy a alguna concentración, fiesta, reunión o, simplemente, me piro por ahí con la moto, siempre me encuentro a los mismos? ¿Acaso somos tan pocos? ¿Realmente ya nos conocemos todos? A mi me parece que no. Espero que nadie me malinterprete. Me gustan los bares como al primero (los que me conocen bien, creen que demasiado), disfruto lavando la moto con mis colegas, alucino cuando le pongo alguna pieza que la pueda mejorar y no creo que sea nada malo. Pero no se nos puede olvidar que nada de esto sirve si no ruedas con tu máquina. Se perfectamente que uno no siempre puede ir a todos los sitios que le gustaría. Las jodidas pelas y el curro andan siempre fastidiándolo todo. Pero hay que echarle cojones y, muchas veces, para ir a los sitios sólo hace falta subirse en la máquina y enfilar la jodida carretera. Siempre vale la pena. Además, para qué coño quieres un sillín Corbin si tus huevos no van a estar encima más de media hora.
Lo siento mucho, espero no haber ofendido a nadie, pero tengo la puta costumbre de escribir las cosas tal y como las pienso. De todas formas: el que se pica...
Nos vemos en la carretera... o en la bodeguilla.
MATEO

No hay comentarios:

Publicar un comentario