lunes, 20 de octubre de 2008

Los incómodos badenes: ¿solución a la vista?



Uno de los elementos que nunca he podido acabar de comprender son los badenes ubicados transversalmente en la calzada para evitar los excesos de velocidad. Sí, está claro: o frenas, o el bote que pegas en el asiento de tu coche (y ya no quiero ni explicar las sensaciones en moto) es de esos que hacen época. Pero el problema es que estos badenes deben pasarse muy a menudo a velocidades inferiores a los 10 km/h, y eso ya no tiene ningún sentido.

Y todo esto sin considerar los daños mecánicos que puedan sufrir los amotiguadores de nuestro coche, que tampoco son despreciables. E incluso hay badenes que ponen en un serio riesgo los bajos del coche. Y bueno, ya si nos ponemos en la situación de una ambulancia en servicio de emergencia, por ejemplo, que lleve a bordo un enfermo, pues imaginaos lo útil que puede llegar a ser el tener que ir frenando en cada intersección. Pero parece que un equipo de granadinos ha dado con la solución idónea: un dispositivo que mejora la seguridad vial y evita los peligros y molestias que crean los badenes de hormigón.


El grupo que ha inventado y patentado la idea está formado por Armando García, Montse Godoy y Benigno Guerrero, y el invento en cuestión es un badén inteligente, automático y plegable, que por defecto no está entorpeciendo enmedio de la calzada, y sólo se eleva en caso que el vehículo circule a una velocidad excesiva, y no se trate de un vehículo de emergencia como una ambulancia, un coche de bomberos o uno de policía.

El sistema sólo requiere un hueco de 20 cm de profundidad en la calzada para que pueda ser instalado, y es un sistema mecánico oculto el encargado de hacer subir y bajar la plataforma del badén. Y vaya, a detectar un exceso de velocidad no hace falta que enseñemos a nadie, que de eso ya se tiene una cierta experiencia. El prototipo ya está en su fase final, y ya han recibido unas ofertas astronómicas para comprar la patente del sistema. Pero el sueño de este grupo no es forrarse con el invento. Lo único que quieren es “que el proyecto se quede en Granada, que una subvención nos permita fabricarlo y crear puestos de trabajo aquí”. Además, la DGT, que conoce el proyecto, lo ve “factible y viable”.

Le podemos encontrar varios peros a la idea, pero como la iniciativa es buena, me limitaré a aplaudirla y esperar a conocer su funcionamiento de una manera más profunda, para poder emitir un juicio de valor mucho más fundamentado.

Fuente: http://www.circulaseguro.com/

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